Carta a S.M. los Reyes Magos de Oriente

En los últimos años, he compartido mis humildes reflexiones con los lectores de este medio pero, jamás había plasmado por escrito los deseos que había formulado a los Reyes Magos de Oriente. En esta ocasión y con motivo de las trascendentales decisiones que deberá adoptar el Gobierno de la nación en los próximos meses, en relación a las diferentes peticiones trasladadas desde el Ejecutivo autonómico, han justificado el que me haya decidido a compartir con ustedes esta modesta “carta” repleta de ilusiones, deseos y anhelos.

Como no podía ser de otra manera, mi primer deseo expresa unas firmes convicciones fundamentadas en los excelentes resultados cosechados como consecuencia de la denominada “lealtad institucional” imperante en las relaciones establecidas entre Juan Jesús Vivas y José Fernández Chacón demostrando, que el interés general de todo un pueblo debe primar por encima de intereses partidistas. Entendimiento y concordia, que han fructíferado en importantes acuerdos trasladados al Gobierno de la nación para su consiguiente resolución.

Por orden de importancia, debo continuar con el deseo de que se cumpla, lo antes posible, la propuesta presentada por el Ejecutivo local en relación a dar cumplimiento a lo previsto en la Disposición Adicional 2ª de los Estatutos de Autonomía de Ceuta y Melilla, donde se establece, en ambos casos, el mandato de actualizar y garantizar, mediante Ley del Estado, las peculiaridades del obsoleto Régimen Económico y Fiscal Especial que rige en las dos ciudades.

A continuación, el anhelado sueño de que nuestra ciudad consiga por fin, el reconocimiento de nuestras especificidades por parte de todos los estados miembros que conforman la Unión Europea alcanzado por tanto, un rango similar al de Región Ultraperiférica. Circunstancia, que también debería ir aparejada con la consecución de la histórica reivindicación del reconocimiento de la frontera del Tárajal como aduana comercial con nuestro país vecino.

Y finalizó mi carta, exteriorizando un último deseo aunque, no por ello menos importante, el abaratamiento de las abusivas tarifas existentes en el transporte de pasajeros y mercancías entre los puertos de Ceuta y Algeciras, decisión que viabilizaría el despegue socio económico de una ciudad limitada históricamente por su insularidad. En definitiva, cinco peticiones fundamentales, que esperan la respuesta de un aparentemente comprometido Ejecutivo socialista.