domingo, 30 de mayo de 2010

Decisiones responsables

La decisión adoptada la pasada semana por el Ejecutivo socialista como consecuencia de las exigencias de la Comisión Europa y de los Estados Unidos de América supondrá el mayor recorte en derecho sociales de nuestra historia democrática, con el único objetivo de reducir el déficit público ya que, hasta el momento no han planteado otras medidas que pudieran corregir la tendencia actual de nuestra economía. Todas las administraciones públicas deberán adoptar las medidas incluidas en el decretazo aprobado por un solo voto de diferencia en las Cortes Generales el pasado jueves y como no puede ser de otra manera, las comunidades y ciudades autónomas serán las primeras en cumplimentar las directrices marcadas desde el Gobierno de la nación.

Hasta el momento, nuestra ciudad no ha sufrido especialmente los efectos de una crisis que en cualquier localidad peninsular ha supuesto una considerable disminución en los gastos extraordinarios de las familias españolas. A partir de la entrada en vigor del decretazo, que incluirá los recortes en los salarios de los funcionarios, nuestra Ciudad experimentará una situación similar a la mencionada al existir un importante número de trabajadores públicos en ambas administraciones, que se verán obligados a recortar los presupuestos destinados a actividades lúdicas, recreativas y comerciales, que afectarán drásticamente a los ingresos de la Ciudad Autónoma de Ceuta. Circunstancia, que provocará necesariamente la disminución en las partidas destinadas a los diferentes servicios que la ciudad presta a sus ciudadanos.

No obstante, el Ejecutivo local deberá reflexionar en profundidad y decidir en consecuencia donde establecer dichos recortes, que sin ninguna duda, deberán producirse en aquellas áreas o actividades que no supongan una disminución en las prioridades de un Gobierno, que ha mostrado una exigente sensibilidad, en los últimos años con los colectivos más desfavorecidos de la ciudad por tanto, estos deberán producirse en las partidas destinadas a protocolo, eventos sociales, festivos y recreativos así como, en las destinadas a sufragar los gastos de algunas asociaciones, entidades y clubes deportivos. Entre estos últimos, debo destacar quien ha sido beneficiario en los últimos años con importantes partidas provenientes de las arcas públicas sin haber conseguido alcanzar el objetivo propuesto en los últimos cuatro años, la Asociación Deportiva Ceuta.

Quizás, sea el momento de retrotraernos en la historia del fútbol ceutí con la intención de extraer experiencias que pudieran enriquecer a los futuros dirigentes al objeto, de llevarlos a la práctica en el nuevo proyecto. Aún perdura en la memoria de muchos ceutíes la hazaña alcanzada el 25 de mayo de 1980 cuando, la extinta Agrupación Deportiva Ceuta de los Cherino, Cerezo, Malavert, Serrán, Almagro, Mena, Luque, Lima, Juanma, Lolo, Borreguito y Kubalita lograron el último ascenso a la división de plata del fútbol español. Una formación que alineaba en el once inicial hasta ocho jugadores de la cantera ceutí, que consiguieron alcanzar el objetivo soñado al vencer en la penúltima jornada con gol de falta directa de Pepe Almagro al Gerona.

Por tanto, quizás es el momento oportuno para plantearse emprender un nuevo proyecto argumentado en la consecución de objetivos menos ambiciosos aunque, no menos ilusionante. Un proyecto de futuro fundamentado en la dinamización del fútbol base local, ofreciendo la posibilidad real a nuestros jóvenes valores de formarse durante la próxima temporada en una categoría superior, recuperando para ello a la nutrida representación de futbolistas afincados en otras tierras e integrándolos en el primer equipo de la ciudad. En definitiva, es el momento de racionalizar los recursos disponibles con la única intención de renovar una modalidad deportiva que necesita de la implicación de todos los estamentos del deporte y en particular, de los relacionados directamente con el fútbol en un proyecto común, dinamizando el fútbol base ceutí.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Motivos para creer

El pasado jueves, con nocturnidad y alevosía; los trabajadores, los estudiantes, los pensionistas, las madres, los desempleados, es decir, la ciudadanía en general, sufrimos el mayor ataque contra el estado del bienestar de los últimos años. El Ejecutivo de José Luís Rodríguez Zapatero, del partido socialista obrero y español, los progresistas, los únicos garantes de los derechos y las libertades, los del talante, los de la ceja, perpetraron el mayor recorte en derechos sociales y la primera bajada en los salarios de millones de trabajadores públicos de los últimos 32 años, es decir, desde que los españoles decidimos mayoritariamente constituirnos en un Estado democrático.

Circunstancia, tan sólo comparable a la protagonizada por otro gobernante socialista, por el emperador Felipe González, quien con una tasa de desempleo superior al 20% y un déficit público cercano al 19%, protagonizó el primer decretazo contra las políticas sociales en nuestro país, recibiendo por ello, el rechazo mayoritario de la sociedad española y la consiguiente pérdida de la presidencia del Gobierno. Hoy, 15 años después, corresponde a otro dirigente socialista, protagonizar el segundo recorte en nuestra corta historia democrática aunque, en ambos casos, como consecuencia de las políticas dirigidas por una izquierda española capitaneada por el partido socialista.

Ahora, estos mismos progresistas, con su talante y verbigracia, pretenderán convencernos, con argumentos y justificaciones varias, sobre la necesidad de adoptar unas medidas, que corregirán lo que durante meses; líderes políticos, dirigentes económicos, expertos financieros e incluso, relevantes miembros del partido en el Gobierno, ya habían pronosticado. Que no nos engañen, las medidas adaptadas han sido exigidas por quienes en un pasado muy reciente, eran nuestros socios, nuestros compañeros de viaje en la cima de la política internacional hoy, cambiados por personajillos como Evo Morales, Fidel Castro o Hugo Chaves, situando a nuestro país al final de cualquier lista representativa de la hegemonía mundial.

No obstante, la incapacidad del Ejecutivo socialista alcanza cotas inimaginables ya que, no solo ha sido el mayor responsable de nuestra precaria situación actual sino que, las medidas adoptadas incluyen incongruencias tan relevantes, que incluso algunas de ellas han debido ser rectificadas al día siguiente. Ha llegado el momento de adoptar posturas reivindicativas contundentes, ha llegado el momento de actuar, debemos ofrecer unidad contra ineficacia, es el momento de decir contundentemente, basta ya. Ha llegado el momento de utilizar una célebre frase, ya utilizada contra quien protagonizó una situación similar aunque, de menor trascendencia a la actual. VÁYASE, SR. ZAPATERO.

sábado, 22 de mayo de 2010

¿Cuándo responderán equitativamente?

Durante años nuestro país ha sufrido la ineptitud en la gestión de los recursos públicos de un Ejecutivo socialista, que nos ha llevado a cifras verdaderamente dramáticas; más de 5.000.000 de desempleados y casi un 12% de déficit público, solo comparable a lo sucedido en nuestro país entre los años 1993 y 1995. Circunstancia, que ha provocado el mayor recorte en derechos sociales de toda nuestra historia democrática; reducción de las retribuciones del personal del sector público en un 5% de media en 2010 y congelación en 2011, suspensión en 2011 de la revalorización de las pensiones, eliminación de la prestación por nacimiento de 2.500 euros a partir del 1 de enero de 2011, eliminación de la devolución de 400€ del IRPF o la eliminación del régimen transitorio para la jubilación parcial previsto en la Ley.

No obstante, a pesar de encontrarnos en esta pésima situación socio económica, la reacción de los agentes sociales mayoritarios, supuestos garantes de los derechos de los trabajadores en activo y de los desempleados en mayor medida, no ha sido la esperada ya que, apelando a la prudencia, han rehusado en los últimos meses expresar su rechazo a las políticas llevadas a cabo hasta el momento a través del único medio a su alcance, la movilización sindical y en particular, tras los acontecimientos acaecidos la semana pasada la única respuesta posible, convocar la primera Huelga General a José Luís Rodríguez Zapatero.

Quizás, la contestación a esta cuestión podríamos encontrarla en las previsiones de un Ejecutivo, que a pesar de las directrices marcada desde el seno de la Unión Europea, continua negándose a reducir las subvenciones destinadas a las centrales sindicales mayoritarias, organizaciones empresariales y partidos políticos. Mientras el Ejecutivo socialista consumaba el pasado jueves el mayor recorte en derechos sociales de nuestra historia democrática, el Boletín oficial del Estado detallaba las bases reguladoras para la concesión de 15,8 millones de euros en subvenciones dirigidos a las centrales sindicales en función de su representatividad. Debo señalar, que las centrales mayoritarias dirigidas por Cándido Méndez y Ignacio Fernández Toxo se repartieron el pasado año, a partes iguales, más de 190 millones de euros, cantidad incrementada en un 50% desde la llegada de José Luís Rodríguez Zapatero ya que, a las mencionadas anteriormente, debemos añadir las ayudas provenientes de las Administraciones autonómicas, las ayudas destinadas a cursos de formación provenientes del Ministerio de Política Territorial, las provenientes del Ministerio de Trabajo e Inmigración otorgadas como consecuencia de su participación en los diferentes organismos consultivos y las obtenidas a través de las diferentes fundaciones.

En definitiva, los trabajadores españoles sufrimos las consecuencias de las decisiones erróneas adoptadas por el Ejecutivo socialista pero, al mismo tiempo, las consecuencias de nuestra pasividad a la hora de expresar nuestros desengaños como consecuencia del incumplimiento reiterativo de las promesas electorales formuladas por el Partido Socialista durante los últimos años. Promesas desatendidas apresuradamente demostrando, que tan solo representaron el mayor engaño colectivo contra todo el electorado que apoyó mayoritariamente el proyecto político representado por José Luís Rodríguez Zapatero. Ahora, una vez conocidos los últimos datos socio económicos, el alcance de las restricciones incluidas en el decretazo presentado a finales de la semana pasada y las prioridades económicas del Ejecutivo socialista en relación a mantener en silencio el mayor tiempo posible a los representantes sindicales, es el momento de expresar nuestro rechazo absoluto a la labor tanto de los miembros del Gobierno socialista como, de los impasibles dirigentes sindicales. No obstante, esperemos que los últimos acontecimientos hagan despertar de su letargo a quienes deberían dirigir la lucha por el bienestar general de todos los trabajadores españoles desechando beneficios económicos como los mencionados.

jueves, 20 de mayo de 2010

Problemática compleja

En estos momentos, reflexionar en relación a los ataques indiscriminados, que se producen en los alrededores y en el interior de las barriadas Príncipe Felipe y Príncipe Alfonso contra las fuerzas de seguridad del estado o cualquier otro personal público uniformado en el ejercicio de sus funciones, es hacerlo en relación a la coacción que unos cuantos indeseables ejercen contra la inmensa mayoría de los vecinos en ambas barriadas al no poder recibir el servicio solicitado. Innumerables han sido los ataques contra Policía Nacional, Local y Guardia Civil pero, también contra las unidades del Cuerpo de Extinción de Incendios, Urbaser, Servicio Público de Transporte o ambulancias.
Debo señalar, que los dirigentes vecinales han sido desde el comienzo de estos altercados los primeros en exigir la actuación contundente de las administraciones públicas competentes en defensa de la paz y la armonía en la barriada hastiados de la impunidad con la que actúan unos grupos de jóvenes delincuentes inducidos por las principales organizaciones mafiosas que allí desarrollan sus actividades ilícitas. Infractores, que incluso actúan violentamente contra aquellos vecinos que defienden su derecho a convivir en paz recriminando estas incívicas actuaciones y reciben como respuesta el ataque contra sus escasas pertenencias o la agresión física.
Resulta obvio, que el objetivo prioritario de estos desalmados es, sin ninguna duda, poder desarrollar sus actividades ilegales con la impunidad que les confiere el que las Fuerzas de Seguridad del Estado y Policía Local estén ocupadas en otras actuaciones menores aunque, no por ello, de menor gravedad ya que, los lanzamientos de piedras contra estos efectivos podrían ocasionar graves consecuencias a la integridad física de los mismos así como, a la de los propios vecinos de unas barriadas densamente pobladas.
Las administraciones locales han apostado decididamente, en los últimos años, por un núcleo urbano densamente poblado, carente históricamente de importantes infraestructuras básicas así como, de la prestación de servicios esenciales. Las inversiones públicas han aumentado significativamente y la transformación es más que evidente en cualquier zona de estas dos barriadas; accesos a las mismas, Edificio Polifuncional, viviendas, polideportivos descubiertos, zonas ajardinadas, zonas de aparcamientos públicos, canalizaciones y mobiliario urbano. No obstante, aún quedan actuaciones por realizar entre las cuales, debería primar la ubicación de una comisaría de policía que coordinara la labor de las Fuerzas de Seguridad del Estado así como, de la Policía Local en dichas barriadas, reafirmando la disposición de ambas administraciones en solucionar los problemas existentes de inseguridad ciudadana. No es momento de críticas políticas, es momento de unidad y compromiso real por el bienestar general de los vecinos de ambas barriadas.

sábado, 15 de mayo de 2010

Váyase, Sr. Zapatero

Durante los últimos 24 meses, numerosos líderes políticos, expertos económicos y analistas financieros han advertido al Gobierno socialista de José Luís Rodríguez Zapatero, que no estaban adoptando las medidas necesarias para reducir un déficit público que ha ahogado a nuestro país. Las últimas cifras socio económicas cosechadas han puesto en alerta a los actuales dirigentes de una Unión Europea, que ya no consentirán que otro estado miembro sucumba como consecuencia de las nefastas decisiones adoptadas por sus dirigentes.
Los españoles tenemos la obligación de recordar, en estos momentos, como durante años los principales dirigentes socialistas han difundido acusaciones maliciosas contra el Partido Popular en relación a las intenciones de esta formación de recortar los derechos sociales alcanzados por todos los españoles durante los últimos años cuando, la realidad es diametralmente opuesta, un Gobierno socialista recorto en 1995 los derechos sociales de los trabajadores españoles y ahora, 15 años después, otro Gobierno socialista anuncia el mayor recorte de los derechos sociales de toda nuestra historia democrática como consecuencia exclusiva de su nefasta gestión.
Durante meses, el Ejecutivo de José Luís Rodríguez Zapatero ha malgastado el tiempo y los recursos públicos improvisando medidas inapropiadas que han deteriorado gravemente la imagen de España en el exterior provocando que la Unión Europea vigile celosamente nuestras cuentas. El plan de reajuste presentado por el líder socialista incluye entre otras; reducir las retribuciones del personal del sector público en un 5% de media en 2010 y congelarlas en 2011, suspender en 2011 la revalorización de las pensiones, eliminar la prestación por nacimiento de 2.500 euros a partir del 1 de enero de 2011 o eliminar el régimen transitorio para la jubilación parcial previsto en la Ley.
Para el recuerdo quedarán las promesas lanzadas por Zapatero como las pronunciadas en Málaga el pasado 21 de febrero “conmigo de presidente jamás habrá recortes sociales. Los trabajadores no van a perder derechos en la reforma laboral....... y todos los trabajadores tendrán una pensión digna y mejorada”. Frases que muestran el verdadero significado del término talante acuñado por los expertos en comunicación de una formación que ha demostrado a lo largo de todos estos años una falta total de escrúpulos.
El Partido Popular ha mostrado su total apoyo al Ejecutivo socialista para disminuir el déficit público aunque, sugiriéndole otras medidas diferentes que con total seguridad reducirían este déficit cercano al 12% sin recortar los derechos sociales de los más necesitados a través de las siguientes actuaciones; supresión inmediata de la vicepresidencia tercera y de los ministerios de Igualdad y Vivienda, integración de los ministerios de Cultura y Educación y de los de Trabajo y Sanidad, la revisión de todas las partidas de subvenciones y la eliminación de todas aquellas que no estén debidamente justificadas destinadas a organizaciones empresariales, sindicales y políticas así como, un plan completo de reestructuración del gasto público.

En definitiva, una vez más, la historia vuelve a repetirse de la mano de un gobierno socialista, de un gobierno progresista que ha mostrado el verdadero significado del término talante a través del incumplimiento de todas las promesas electorales ofrecidas a la ciudadanía en los últimos años. Durante años retumbó en el salón de sesiones del Congreso de los Diputados una famosa frase, que ahora retoma actualidad al comprobar como la gestión política del Ejecutivo socialista en los últimos años han finiquitado el Estado del Bienestar, defenestrando derechos sociales alcanzados por los españoles durante los más de treinta años de democracia por tanto, ¡VÁYASE, SR. ZAPATERO!.

miércoles, 12 de mayo de 2010

El fútbol local necesita evolucionar

En los últimos días los ceutíes hemos pasado del entusiasmo a la frustración en cuestión de horas como consecuencia de las diferentes informaciones publicada a través de diferentes medios de comunicación en relación a la probable participación de la AD. Ceuta en la que sería su segunda liguilla de ascenso a la categoría de plata en las últimas cuatro temporadas. Debo recordar antes de iniciar mi reflexión de hoy, que esta problemática pudo no haber existido si nuestro equipo hubiera conseguido el punto necesario para alcanzar la cuarta posición por méritos propios venciendo a la UD Melilla.
Sin ninguna duda, la AD Ceuta ha desarrollado una temporada irregular que ha propiciado casi con total seguridad, que no podamos participar en la mencionada liguilla aunque, no es momento de críticas, no es momento de culpabilizar a la Junta Directiva actual o pasada, no es momento de ensañarnos con una plantilla que tan solo ha seguido las directrices marcadas por quienes han dirigido el banquillo blanco y tampoco es cuestión de censurar las recomendaciones y asesoramientos de quienes decidieron apoyar económicamente al primer equipo de la ciudad.
No obstante, sí es momento de reflexionar en profundidad en relación al futuro de un proyecto que ha fracasado estrepitosamente en los últimos años al no conseguir alcanzar el objetivo propuesto. Quizás, es momento de emprender una nuevo diseño basado en el relanzamiento del fútbol base ofreciendo la posibilidad a nuestros jóvenes valores de formarse durante la próxima temporada en una categoría superior, recuperando para ello a una nutrida representación de futbolistas afincados en otras tierras integrándolos en el primer equipo de la ciudad.
Ahora, más que nunca, es momento de iniciar este proyecto argumentado también en la actual situación de crisis que atenaza a la sociedad española y por tanto, a la sociedad ceutí, es el momento de reducir significativamente las subvenciones públicas al primer equipo de la ciudad racionalizando los recursos y los objetivos del mismo. Los ceutíes debemos concienciarnos de las restricciones de una ciudad limitada en muchos aspectos pero, fundamentalmente en esta materia al carecer de empresas de envergadura que pudieran ofrecer el patrocinio necesario para afianzar los presupuestos del primer equipo de la ciudad al margen de las ayudas públicas que pudiera recibir en estos momentos.
En definitiva, es momento de reconocer la labor, el entusiasmo, la entrega y el esfuerzo que directivos, técnicos, jugadores y afición han ofrecido en los últimos años pero, también es momento de evolucionar presentando un proyecto ilusionante a los amantes del deporte y del fútbol en particular a través, del apoyo expreso y real a nuestros jóvenes futbolistas, que sin ninguna duda apreciarán en mayor medida los colores de su equipo al igual que sucediera en otras épocas de nuestro pasado futbolístico más reciente.

domingo, 9 de mayo de 2010

La realidad del Hospital Universitario de Ceuta

Los ceutíes debemos congratularnos con la puesta en marcha definitiva de las nuevas instalaciones del Hospital Universitario de Ceuta; amplias, modernas y equipadas tecnológicamente con los mejores medios materiales existentes en el mercado, que deberían mejorar ostensiblemente un servicio básico para la ciudadanía. Un centro hospitalario, que además reúne en sus 57.000 metros cuadrados todas las consultas externas en beneficio de los pacientes y del propio personal sanitario. Atrás, quedarán para el recuerdo los 42 años de historia del antiguo hospital civil repleto de experiencias tanto, para el personal como, para los miles de usuarios de las antiguas instalaciones de la Cruz Roja en Marina Española y del Centro de Consultas Externas de las Puertas del Campo.

Una vez puestas en marcha las nuevas instalaciones, es el momento de ejercitar un recurso tan práctico como el de nuestra memoria histórica, retrocediendo en nuestro pasado más reciente y recordando a los lectores de esta columna, algunas cuestiones fundamentales al objeto de evitar posibles manipulaciones provenientes desde algunos sectores de la sociedad caballa. Los gobiernos socialistas de Felipe González, con el actual Director Provincial al frente, eran partidarios de reformar el antiguo centro hospitalario, apartando definitivamente la idea, que posteriormente fue programada, planificada, presupuestada e iniciada por el primer Gobierno del Partido Popular de José María Aznar, la construcción de un nuevo hospital para Ceuta. Una decisión trascendente para el futuro de nuestra ciudad, que significó emprender trabajos complejos que se alargaron en el tiempo por tanto, los ceutíes debemos un doble agradecimiento, a quienes planificaron, presupuestaron e iniciaron esta infraestructura y a los actuales dirigentes políticos, entre los cuales también debo incluir a su director actual, Jesús Lopera, quienes continuaron acertadamente con una obra iniciada por el Gobierno anterior.

No obstante, esta puesta en marcha, ha dejado al descubierto algunas deficiencias importantes entre las cuales, debo destacar por su relevancia, la falta de personal. Resulta obvio afirmar, que el incremento considerable en las dimensiones de las nuevas instalaciones, más de 57.000 metros cuadrados de superficie, los nuevos servicios creados y el incremento en la presión asistencial proveniente del país vecino , junto con las políticas restrictivas en relación a la contratación de personal puesto que, a fecha de hoy aún se mantiene el mismo número de efectivos que el existente en las antiguas instalaciones de la Marina Española, esta provocando una importante carencia en los recursos humanos. Circunstancia puesta en evidencia tanto, por los miembros de la Junta de Personal del Ingesa en representación de todo el personal como, por un considerable número de usuarios que comprueban desde su inauguración unas limitaciones que provocan deficiencias en el servicio.

Por tanto, los ceutíes deberíamos exigir con firmeza a los actuales dirigentes sanitarios el reconocimiento de una problemática, que afecta directamente a la calidad de los servicios que se prestan en las nuevas instalaciones de Loma Colmenar como consecuencia de la escasez en el número del personal sanitario que allí desempeñan sus funciones. Deficiencia detectada tanto, por la representación sindical de los trabajadores como, por los usuarios de los diferentes servicios. En definitiva, una situación lamentable, que debería ser reconsiderada en la mayor brevedad posible, al objeto de mejorar el trabajo de unos excelentes profesionales de la sanidad ceutí y con ello, conseguir una mejora sustancial en la atención al paciente. Sin ninguna duda, todos agradeceríamos esta decisión.

sábado, 8 de mayo de 2010

Consecuencias del extremismo radical

Siempre he sostenido que la historia de nuestro país debe ser estudiada en profundidad y exactitud al objeto de extraer las enseñanzas necesarias para aplicar en el presente en función de las conclusiones extraídas. España posee una historia repleta de acontecimientos cuyos inicios se pierden en los tiempos más remotos pero, que muestra por otro lado, la riqueza de un país cuya Edad moderna comienza con el descubrimiento de América por Cristóbal Colón en 1492, año en el que también se produce la anexión del Reino de Granada. Finalmente, en 1512 con la anexión del Reino de Navarra toda la península Ibérica, excepto Portugal, paso a pertenecer a los Reyes Católicos y a sus herederos.
No obstante, me centraré en otra etapa importante de nuestra historia más reciente con la intención de extraer algunas conclusiones que pudieran ser utilizadas por los lectores al objeto de reflexionar en profundidad sobre una realidad soñada y finalmente alcanzada por los Reyes Católicos, la unidad de España. La Segunda República, un breve periodo de nuestra historia en el que los ciudadanos instauraron un estado democrático y republicano tras la salida del rey Alfonso XIII el 14 de abril de 1931, alargándose en el tiempo hasta el 1 de abril de 1939, fecha de la victoria del bando insurgente tras la Guerra Civil Española iniciada el 17 de julio de 1936 como consecuencia del levantamiento de una parte de la sociedad española desengañada con dicho régimen.
La II República significó la ruptura definitiva con el régimen anterior aunque, en ningún momento cumplió con las expectativas creadas en un proletariado que comprobaba indignado como no se alcanzaban los objetivos incluidos en una Constitución cuyos principios fundamentales se resumían en la igualdad de los españoles ante la Ley, el principio de laicidad, separación de Iglesia y Estado, sufragio universal y el reconocimiento del matrimonio civil y divorcio. Aunque, el crecimiento de las tensiones sociales provocadas por los extremismos radicales provenientes tanto de la derecha como de la izquierda política finalizó por provocar la única respuesta posible ante una situación insostenible tras los asesinatos de José del Castillo y de José Calvo Sotelo, detonante de la Guerra Civil.
En definitiva, los españoles estamos obligados a recordar dramáticos episodios de nuestro pasado más reciente al objeto de evitar en lo posible tensiones entre las diferentes posturas ideológicas existentes en la sociedad actual. La Constitución Española de 1978 es el documento normativo a cumplir por todos los integrantes de la nación española al objeto de convivir en paz y armonía eliminando tensiones artificiales creadas con la única intención de desviar la atención de la incapacidad de un Gobierno que ha llevado al país a alcanzar las peores cifras socio económicas desde la aprobación de nuestra Carta Magna en 1978.

Ruptura en la unidad de acción sindical

En los últimos años, la unidad de acción sindical de las dos principales centrales mayoritarias, UGT y CCOO, ha experimentado un frágil equilibrio como consecuencia de diferencias sustanciales en ocasiones, totalmente insalvables. Resulta extraño comprobar como, con las actuales cifras que evidencian nuestra lamentable situación laboral, 4.500.000 de desempleados, la defensa de los intereses de estos trabajadores españoles no es el principal argumento en la labor diaria de unas organizaciones, que han olvidado precisamente, que su objetivo principal debería ser la defensa del pleno empleo como uno de los principales derechos incluidos en nuestra Constitución.

En nuestra ciudad, esta ruptura en la unidad de acción sindical aún es más evidente. Intereses personales alejados totalmente del interés general han provocado que ambas centrales sindicales hayan disentido en los últimos meses en cuestiones fundamentales en la defensa de los derechos de los trabajadores en diferentes sectores del mercado laboral ceutí. Es momento de recordar las diferencias existentes en mejorar la calidad de la sanidad ceutí, en la defensa de los derechos de los trabajadores desempleados o en la mismísima asistencia por separado a los actos del tradicional Primero de Mayo.

Sin embargo, los últimos acontecimientos en relación a los contenciosos que presuntamente han implicado al juez estrella, Baltasar Garzón, encausado por el Tribunal Supremo por un presunto delito de prevaricación, al declararse competente para investigar los crímenes y desapariciones de la dictadura franquista, ha conseguido unificar la labor de ambas organizaciones en la reivindicación de exigir la exoneración de una persona, que para estos, no es igual que el resto de los españoles ya que, exigen un trato diferenciado del resto de los ciudadanos. Desde este mismo instante, un principio fundamental de nuestra Constitución debe ser incumplido por el Poder Judicial a petición del progresismo español, desde este mismo instante, todos los españoles no somos iguales ante la ley.

Circunstancia, que atrae a mi memoria otras movilizaciones de nuestro pasado más reciente, movilizaciones de estas mismas centrales sindicales en momentos en los que la bonanza económica en nuestro país posibilitaba que la disminución en las cifras del desempleo se convirtieran en la nota predominante pero que, en las que el hundimiento de un barco llamado Prestige o la presencia de tropas españolas en Irak fueron utilizados para desacreditar la gestión del Gobierno del Partido Popular. Días en los que la intransigencia de unos cuantos y el inmovilismo de otros muchos otorgó el triunfo electoral al candidato socialista, José Luís Rodríguez Zapatero


En definitiva, las centrales sindicales mayoritarias, Unión General de Trabajadores y Comisiones Obreras, evidencian su unidad de acción sindical en cuestiones totalmente alejadas de la principal problemática que afecta a la sociedad española, de la problemática que debería ser el centro de toda gestión sindical, una problemática que impide a más de un millón seiscientas mil personas poder llevar un salario digno con el que sustentar a sus familias. España, los españoles y los desempleados necesitan de la labor conjunta de todas las organizaciones sindicales volcadas en la reivindicación legítima de exigir las medidas necesarias del Gobierno de la nación, competente en dicha materia, que reactiven un mercado laboral obsoleto disminuyendo con ellas la dramática tasa de paro que supera ya el 20%.