miércoles, 10 de octubre de 2012

No estaba tan equivocado


Las  declaraciones efectuadas la pasada semana por el  vicesecretario de comunicación del Partido Popular, Emilio Carreira Ruíz, respecto a uno de los factores  que lleva al fracaso escolar a un importante número de jóvenes ceutíes, situándonos en las primeras posiciones del país  en esta problemática,  provocaron las críticas airadas  de las formaciones políticas en la oposición y  abrieron  al mismo tiempo  un interesante debate sobre una lacra que afecta gravemente  a nuestro sistema educativo.

El responsable popular afirmó “Falta un compromiso que ni el Estado ni ninguna administración pública puede solucionar por mucho dinero que ponga, que los padres se tienen que preocupar por la educación de sus hijos, vigilar por que vayan a clase y que hagan un seguimiento de su educación” y añadió “El Estado puede hacer colegios de oro, pero si los niños no van no servirán para nada. Y si están en sus barrios dando vueltas o haciendo otras cosas, quizás más interesantes, no digo que no, pero si los padres no acompañan a los educadores en la educación habrá otra generación perdida...”
Quienes han criticado estas palabras desconocen totalmente que los padres del país que lidera la clasificación europea en Educación según las conclusiones del último informe PISA, Finlandia, son plenamente conscientes de su responsabilidad en la educación de sus hijos, por delante de la escuela, complementando el esfuerzo que se realiza en los colegios. El 80% de las familias finlandesas van a las bibliotecas durante los  fines de semana con la intención de fomentar este hábito entre  sus hijos. La familia se convierte en uno de los tres pilares del éxito educativo finlandés (familia, escuela y recursos socioculturales).
Evidentemente existen otros factores que sitúan a los jóvenes finlandeses a la cabeza de una  clasificación mundial que valora la calidad de los diferentes sistemas educativos. Entre estos factores debo destacar que  durante los primeros seis años de la primaria los niños tienen en todas o en la mayoría de las asignaturas el mismo maestro, que vela por que ningún alumno quede excluido. Maestros que deben demostrar su excelencia alcanzando las mejores notas para poder impartir sus conocimientos en la educación primaria.  Debo señalar que la educación es completamente gratuita desde prescolar hasta la universidad incluyendo las clases, el comedor, los libros y hasta el material escolar.
Por tanto y pese a las críticas provenientes de la oposición, las afirmaciones del responsable de comunicación de los populares ceutíes no estaban tan descaminadas tras conocer uno de los pilares básicos en el  éxito de un sistema educativo basado en la perfecta coordinación entre la familia, la escuela y los recursos socioculturales. Si todos somos conscientes que  la educación es la llave para el desarrollo de un país, todos deberíamos implicarnos en la educación de nuestros jóvenes desestimando la utilización partidista de esta problemática. En definitiva, Emilio Carreira no estaba tan equivocado.

0 comentarios:

Publicar un comentario