Las cuatro verdades del barquero

Las manifestaciones efectuadas en los últimos días con motivo del informe técnico encargado por el Gobierno de la Ciudad a los servicios de Intervención respecto a la situación contractual con la anterior empresa adjudicataria del servicio de limpieza viaria, Urbaser,    ponen de manifiesto la ausencia total de memoria histórica de alguno de nuestros dirigentes  políticos. Una falta de memoria motivada, o bien por la  bisoñez de algunos de ellos  o por el  interés partidista en desacreditar la gestión del Ejecutivo local. Por cierto, una adjudicación elaborada  y aprobada por los diputados del grupo parlamentario pertenecientes al Grupo Independiente Liberal (GIL).

En principio, recordar la responsabilidad de unas formaciones políticas (PP, PDSC Y PSOE) que suscribieron un pacto de gobernabilidad, obviando diferencias ideológicas,  con la única intención de apartar del Gobierno de la Ciudad al Grupo Independiente y Liberal del fallecido Jesús Gil.  Una vez hecho este reconocimiento, recordar también que fue el voto favorable a la moción de censura de la ex diputada socialista, Susana Bermúdez, el que  posibilitó el acceso al sillón presidencial del  grupo venido desde Marbella. Por cierto, puestos a recordar, no quisiera finalizar este párrafo sin puntualizar,  que este fue el único medio de  comunicación escrito de la ciudad que  mantuvo su independencia informativa en una época especialmente convulsa.

Una vez hechas estas puntualizaciones, a fecha de hoy conocemos en relación a esta polémica, que existe un informe técnico encargado por   el Gobierno de la Ciudad  para conocer exactamente la relación contractual con la anterior concesionaria del servicio de limpieza. Un informe que señala  claramente un saldo positivo  a favor de  la administración local por un importe de 12,5 millones de euros. También conocemos las acusaciones vertidas por el secretario general del partido socialista de Ceuta,   compartidas por otras formaciones políticas en la oposición  a excepción de la coalición Caballas. Y por último, que corresponderá a la Justicia pronunciarse respecto a una polémica que ha puesto en serios apuros al Gobierno de la Ciudad.